The Belgian student of Russian literatur by thadeusz I like this story because it shows the dangers of believing in promisses made by Russian soldiers ! by Roberto on 21 Jul 2025
Scissors of Spite Part 1 by AnonymousHairLover So intriguing this far. I LOVE your writing, keep at it! It's so rich and well-done. by Anon on 21 Jul 2025
Scissors of Spite Part 1 by AnonymousHairLover Please continue this story!!! by davidgallhanger on 20 Jul 2025
Scissors of Spite Part 1 by AnonymousHairLover Please continue this story!!! by davidgallhanger on 20 Jul 2025
el dia que conoci a Quiroga by jenrique Es un placer que te hayas incorporado a esta página, aunque sea en calidad de opinador. Yo también tengo varias historias sobre padres autoritarios que obligan a pelarse a sus hijos; mi alias es Barbero Militar. A mí también me raparon de pequeño con las temidas maquinillas manuales. Cuando te la pasaban por el cuello, en dirección a la coronilla, daba la sensación de que un enjambre de insectos te propinaban pequeños mordiscos. En el fondo todo aquello era muy placentero. Así nació mi morbo por los esquilados estilo recluta. Un saludo desde Madrid. by BARBERO MILITAR on 18 Jul 2025
The Locks of Grand Eclipton series FYI, the author has been advised of the requirement for actual haircutting in stories to be published. Parts 1-4 have been allowed to build anticipation. Additional parts won't be published unless they contain actual haircutting.
Site moderator by ClipperAddict on 18 Jul 2025
el dia que conoci a Quiroga by jenrique Qué buena historia. Soy nuevo en este espacio y me estoy enterando que no era sólo a mí que me pasaba lo de esos cortes brutales de pelo que me solía hacer dar mi padre durante mi infancia.
El peluquero era un tal Vittorio. Un tano siempre malhumorado que disfrutaba pelarme a mí y a todos los niños y jóvenes que eran arrastrados a su peluquería. Las viejas máquinas cortapelos manuales hacían estragos en nuestras cabezas para la satisfacción de los padres que querían ver a sus hijos bien rapaditos. No había niño que no saliera llorando de la peluquería. Las madres, siempre un poco más protectoras, lloraban al ver a sus hijos esquilados como ovejas. Mi padre también me llevó a esa peluquería casi hasta mis 17 años , momento en el que ese peluquero se jubiló. Un comentario gracioso: No sé si por venganza , o qué, yo me hice peluquero. hace casi 40 años que corto el pelo en Lanús. Saludos.