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los sacrificios de Cindy by FCM Historias


Siempre tuve el cabello largo, solo me lo dejaban algo corto cuando era algún evento de la escuela en el que no quedaba de otra que cortarlo, tenía una amiga llamada Cindy, ella era demasiado atractiva, cabello largo hasta la cintura, rubia, de ojos verdes y con un cuerpo increíble, nunca entendí como fue que quiso ser mi amiga aunque muchas veces me decían que tal vez ella quería conmigo, yo no les creí nunca, a ella le gustaban los chicos que se cortaban el pelo muy seguido y a mi no era lo que me agradara hacer, ella siempre jugaba con mi pelo y me decía que algún día lograría que me lo cortara, que era capaz de aprender solo para poder cortarlo, yo le decía que para que algo así sucediera ella tenía que perder el suyo pero era una broma, nuestra amistad era demasiado buena y gracias a que yo le ayudaba con lo que no entendía, ella logró mejorar mucho sin darse cuenta, íbamos en la universidad cuando ella un día decidió quitarse lo que tanto quería, al llegar a la escuela nadie creía lo que había pasado, a mi me tuvieron que contar para que fuera a buscarla, al verme no dejó de sonreír, yo tenía pena de acercarme y ella me hizo señas para hacerlo, tenía el pelo cortado demasiado corto, era un corte pixie o algo así, después de estar a su lado ella tomó mi mano y la llevó a su cabeza, me dijo lo mucho que le gustaba y yo solo disfruté el momento, ella me preguntó si me gustaba su cambio, le dije que si, ella me abrazó y me dijo al oído: ¡yo ya hice mi parte, ahora falta que tú te animes!, luego comenzó a reírse y después de acariciar mi pelo que ahora era mas largo que el de ella me dijo que era una broma que no me asustara, nos fuimos a clase y todo mundo no dejaba de verla, llamaba demasiado la atención, pasaron unos días y algunas compañeras comenzaron a imitar lo que hizo, ninguna se veía como ella, pero al menos se veían bien, yo noté que muchos la invitaban a salir y aunque ella rechazaba a la mayoría, alguno tuvo suerte y terminó saliendo con ella, pero por alguna razón yo no me atreví, fue pasando el tiempo y ella no siguió dando mantenimiento a su corte. Una vez decidí preguntarle mientras caminábamos, hacia su casa, ella se puso contenta y me dijo que lo había hecho por curiosidad de saber como se veía, que le había gustado mucho pero que el verdadero objetivo era para ver si aquello lograba convencerme de cortar el mío, después de ver mi cara me dijo que no me preocupara, que no pasaba nada malo y que si se volvía a animar lo haría, pero que si yo quería intentarlo ella estaría aún mas contenta de no hacerlo sola, me acarició el cabello y continuamos el camino hasta su casa.
Yo no estaba seguro si quería cortarme el cabello pero sabía que ella me atraía mucho y me ponía muy celoso cuando alguien mas la invitaba a salir.
Cada cierto tiempo me imaginaba a Cindy si la mayoría de ese gran pelo, pero sabía que tenía que esperar un milagro o cortar el mío para volver a verla de aquella manera, no tuve el valor para hacer nada y seguí sintiendo. Celos de cada chico que la invitaba a salir.
Pasó el tiempo y faltaba muy poco para salir de la universidad, mi cabello era mas largo que nunca y el de Cindy lo era aún más que cuando decidió cambiar su estilo, una de sus amigas le dijo que sería buena idea que se hicieran cortes para la graduación, ella dijo que sería una buena idea y luego fue conmigo, me jaló mi pelo y dijo: ¿no quieres acompañarnos si nos hacemos un corte para la graduación?, estuve a punto de decirle que si pero ganó mi cobardía y rechacé su oferta, ella parecía un poco molesta con mi respuesta y me dijo: ¡quiero apostar contigo entonces!, sus palabras me tomaron por sorpresa y dijo: sé que deseas ver caer todo mi cabello nuevamente, te propongo lo siguiente: si salgo mejor que tú en los exámenes te cortas el pelo a mi gusto, si quiero raparte lo puedo hacer sin que te niegues, ¿y si no sales mejor que yo?, pues si quieres raparme no pondré ninguna traba, pero creo que te gusta mas el corte que me hice hace unos años, me parece buena tu oferta, ¿estás segura de perder ese pelo tan lindo?, ¡yo no tengo miedo!, dijo ella, pero tengo otra petición, -¿cual?, -¡si salimos iguales iremos los tres y tienes que hacerte un corte equivalente al mío, esa segunda idea no me agradaba tanto pero ella se giró a propósito y ese pelo rubio era mi debilidad, -¡acepto tu apuesta!, se acercó para darme la mano y dijo: ¡será un placer arrancarte tu pelito!, se veía muy segura pero nunca había salido mejor que yo en los exámenes, Andrea se acercó para acariciar mi cabeza y dijo: ¡yo quiero ver caer todo esto!, ¡apuesta tú también!, no me van a ganar ni entre las dos, Andrea me miró, se pasó la mano por el pelo y dijo: ¡entro en la apuesta!, si ninguna de las dos te gana tú eliges sobre las dos pero si una sola te gana o empata, ¡los tres quedamos iguales!, le di la mano para confirmar la apuesta y dijo: ¡no sé que acabo de hacer!, Cindy está un poco loca y tú también, ¡ojalá que no empatemos!, los tres comenzamos a reír y nos fuimos a clase.
Se acordó mostrar las calificaciones hasta el final para darle emoción, yo era un matado y casi tenía calificaciones perfectas, no me iban a ganar ni soñando, aunque había algo raro en la confianza de Cindy, recordé que en el último semestre no habíamos hablado mucho sobre calificaciones pero intenté no clavarme con eso para no ponerme nervioso, ellas jugaban bien sus cartas y antes de cada examen pasaban para acariciar mi cabeza y decir algo que lograra ponerme nervioso, fue muy divertido verlas haciendo cosas raras para distraerme, Andrea no era rubia pero tenía muy bonitos ojos cafés y un cabello oscuro increíble, la verdad era demasiado atractiva y también iba al gym como Cindy,, se terminaron los exámenes y ellas decían que había que ir a la estética para que ninguno quisiera escapar, ahí daríamos las calificaciones y sabríamos quien ganó, no me agradaba tanto esa idea pero no quería dejar pasar la oportunidad de ver caer tanto pelo bonito, parecía que aquello me tenía bastante hesitado, nos pusimos de acuerdo y quedamos en vernos a las 7 cerca del lugar de pago de la apuesta, ambas estuvieron muy puntuales, yo estaba muy confiado y fuimos a la estética, al entrar me puse nervioso, terminamos de entrar y comencé a mirar el lugar a detalle, había dos estilistas, una tenía el cabello rubio y la otra muy oscuro, ambas eran algo altas y de test blanca, cada una tenía una clienta en la silla, las paredes eran de un color azul fuerte, los sillones de espera eran de color negro, sus muebles frente a las sillas eran blancos y el piso era muy curioso, era negro pero con unos cuadros blancos en los que estaban colocadas las sillas de corte, había cuatro mujeres esperando y su turno y le dije a Cindy, creo que esto tardará un poco, al decir eso comenzaron a hacer que las clientas de las sillas revisaran sus cortes, lo aprobaron y les retiraron la capa, me di cuenta de que las sillas eran blancas y mientras pagaban las otras clientas tomaron asiento, Andrea me jaló del brazo y me sentó a su lado, se notaba nerviosa y me dijo: estamos igual pero espero de verdad que seas quien pierda, solo le sonreí, Cindy dijo: ¡ya perdió y no hay escape!, yo me mantuve tranquilo, la verdad habían sido examines difíciles y eso me hacía sentir aún mas seguro, estuve moviendo las piernas por los nervios y la estilista rubia me miró mientras fue por algo, luego me dijo: ¡tranquilo amigo!, ya pronto te sentaré aquí!, agaché la cabeza y me puse a pensar muchas cosas, si había ganado haría que ambas se raparan por habladoras, esperaba no haber perdido, sin darme cuenta pasó el tiempo y terminaron con ambas clientas, se fueron y la chica de pelo negro que parecía algo mas joven se acercó y dijo: ¿el es el chico del que me has contado verdad?, Cindy me la presento y dijo que su nombre era Liliana, pero podía llamarla Lili, no dejaba de sonreírme y eso me ponía nervioso, nos dijo que esperáramos un poco y fue a cerrar la puerta con llave, ¡ahora si ya está todo listo!, podemos comenzar con la diversión, su madre le pidió calma y Cindy me pidió sacar mi teléfono, lo saqué, tomé una foto de mis calificaciones y se lo pasó a Lili, Andrea le dio el suyo a la mamá de Lili, por último Cindy se lo pasó a Lili, la mamá se presentó y dijo que se llamaba Laura, le dijo a Lili que cambiaran mi teléfono para que fuera correcta la comparación y sería mas sencillo, lo cambiaron y uno de nosotros decía el nombre de una materia, primero me compararon con Cindy, empatamos en cuatro calificaciones pero en dos le logré ganar, ella estaba muy nerviosa y me dijo: ¡que bueno que no aposté sola!, comenzó a reírse, yo tuve la confianza y le jalé su pelo, ella me dijo que aún no cantara victoria y comenzaron a compararme con Andrea, ganó en la primera, empatamos en tres, la quinta gané y cuando se dio la última calificación Andrea no podía creer que hubiera empate, Cindy me abrazó y dijo: ¡haremos lo posible por quitarte todo lo que podamos!, yo me puse nervioso pero no podía salir corriendo, Andrea no dejaba de tocarse la cabeza y Lili le pidió que pasara a su silla, la preparó y Cindy fue a la otra silla, yo no dejaba de temblar, les midieron el cabello y Andrea dijo: ¿pueden medir el de él?, la señora Laura fue a un cuarto y sacó una silla que ya no utilizaba, me pidió que me sentara y comenzó a desenredar mi pelo, luego sacó una cinta y lo midió, les dijo que era de unos 25cm, ambas se emocionaron y Andrea dijo: ¡yo le tengo ganas a tu pelo desde hace mucho!, doña Laura dijo: ¡yo creo que lo justo es que si ellas perdieran la mayoría del pelo, se hiciera lo siguiente, si se cortaran cada una el 90% lo correcto sería que tu perdieras el 95%, la otra opción sería que por cada cm de ellas te quede uno o dos milímetros a ti, a ellas les fascinó la idea y eligieron corte, les pusieron la capa y comenzó todo, les quitaron una cola de pelo enorme a cada una y luego les empezaron a cortar con tijera mucho pelo, yo estaba esperando turno, estaba algo hesitado viendo sus cortes y no podía creer hasta que punto llegaban ambas con tal de que yo recibiera un corte, doña Lau le preguntó algo a Cindy, esta le respondió en voz baja y después de unos minutos Lili pareció empezar a detallar el corte, de pronto se detuvo y le empezó a quitar la capa, le dijo que ya estaba lista, ella se levantó y luego comenzaron a quitarle la capa a Cindy, ambas tenían el pelo muy corto, era como de unos 7cm el de Cindy, el de Andrea era de unos 10cm, ambas no dejaban de sonreír, se miraban en el espejo y se tomaron fotos, luego regresaron y me tomaron de la mano, me levantaron y me dejaron elegir con quien me sentaría para mi corte, estaba indeciso y me sentaron en la silla de Lili que era la que ya había limpiado el pelo de Andrea, me sentaron y esta no tardó en cubrirme, ellas se pararon frente a mi, se dieron la vuelta y les midieron el pelo, era menos del 10% me dijeron que era lo que elegiría, porcentaje o milímetros por cm de ellas, yo estaba bloqueado y no lograba sacar las cuentas para no perder tanto, dije que aceptaría lo de milímetros y dijeron que sería uno por cada cm de ellas, juntaban 17cm entre las dos y eso significaba que había que redondear, por suerte quedaba mas cerca el numero 6 de la maquina y no el 4, Lili giró la silla para que no pudiera ver, tomó las tijeras y metió mi pelo entre sus dedos, yo cerré los ojos y ellas comenzaron a reír mientras las tijeras cortaron el mechón, ella no lo soltó al piso, lo echó sobre la capa, volvió a tomar otro y repitió el proceso, fue cortando hasta que sintió que ya estaba descubierto el cuello, tomó un mechón del lado izquierdo y cortó hasta una altura que quedara libre mi patilla, se pasó del lado derecho y repitió la acción, yo quería llorar, ellas estaban demasiado felices, Lili fue al mueble y abrió un cajón, buscó algo y luego desenganchó una maquina , se paró detrás mío y escuché un clic, doña Lau dijo: ¡ahora si parecerás hombrecito!, se empezaron a reír y escuché otro clic, luego un zumbido y mis piernas temblaron, ella inclinó mi cabeza al frente, puso la maquina pegada a mi cuello y cuando comenzó a subirla tuve un escalofrío, ella logró reaccionar y alejó la maquina a tiempo, me pidió que me calmara y volvió a pegar la maquina, esta vez subió sentí como se llevaba una gran cantidad de pelo, la subió hasta la coronilla y la despegó, ¡wow, eso es increíble!, dijo Andrea, Lili colocó la maquina para la siguiente pasada y volvió a subir lentamente, la maquina se llevaba la mayoría del pelo de la parte posterior, siguió dando pasadas, unas muy largas y otras mas cortas, luego pegó la maquina y comenzó a ir subiendo con movimientos cortos, sin despegarla de mi cabeza, fue haciendo esto por toda la parte posterior y cuando estuvo conforme sentí que la maquina subió detrás de mi oreja, la cantidad de pelo que caía era increíble, ella dobló mi oreja con cuidado y comenzó a pasar la maquina en esa parte, yo tenía una cara de tristeza y ella me dijo: ¡no sé si te sirva pero te verás muy bien cuando termine!, tienes un rostro para el pelo corto, eso me hizo sonreír un poco, ¡así me gusta!, que no estén tristes en mi silla, levantó con una mano mi patilla izquierda y subió la maquina, yo seguía sin creer que de verdad estuviera pasando todo eso, yo no me visualizaba saliendo con un corte y ahora estaba quedando sin la mayoría del pelo que me creció durante años, Lili terminó pronto con el lado izquierdo, pasó su mano y no se sintió tan mal, comenzó detrás de la oreja derecha y estuve algo mas tranquilo, a ella le agradó eso y siguió cortando todo el lado derecho, Cindy le preguntó: ¿de ese tamaño le quedará todo?, Lili le dijo que sería un poco menos, pero muy poco, que aproximadamente medio cm mas corto,Lili fue por algo al cajón y cuando volvió comenzó todo el proceso nuevamente, Cindy se veía nerviosa al ver lo que me quedaba y se veía intranquila, yo la miré y le pregunté si todo estaba bien, ella dijo que si, Andrea me dijo: ¿no quieres que quede un poco más corto?, no sé que tanto está quedando, si te digo que si me estarías haciendo trampa, Lili estaba terminando el lado derecho y cuando lo terminó puso la maquina en la parte derecha de mi frente, deslizó la maquina hacia atrás y les cambió la cara, yo sentí como la maquina se llevó mi pelo, se sintió bien pero intenté hacer ver que no, Lili dijo que eso era su parte favorita cuando tenía que hacer un corte a pura maquina, puso su mano detrás de mi cabeza y con la otra volvió a pasar la maquina, lo estaba disfrutando aunque solo ella y yo lo sabíamos, la maquina iba desde el frente hasta atrás, yo no quería que se acabara pero sentí cuando la maquina pasó por última vez, después Lili la pasó lentamente para cortar lo que hubiera quedado, cuando terminó pasó su mano por mi cabeza y dijo: ¡me agrada, aunque quisiera cortarlo más, Cindy se acercó para acariciar mi cabeza, se veía feliz pero no completamente, Andrea también tocó mi cabeza y dijo: ¡creo que es bastante justo el corte!, pero quisiera que quedara un poco más corto de los lados para que se vea mejor, ¡creo que con esto es suficiente!, Andrea se movió cuando Lili se acercó con la maquina para hacer el contorno, Cindy se quedó enfrente viendo y después de que Lili fue a dejar la maquina se acercó a mi oído y me dijo: ¡te quiero rapar!, puedo hacerlo?, o que debo hacer para que te dejes!, si dices que si me siento ahora mismo para ser rapada frente a ti, imaginarla rapada me provocaba mucho morbo, le pidió a Lili que esperara un poco para pasarme la navaja y le dije: ¿es enserio tu propuesta?, ¡sí, tú dime y se hace!, ¡quiero una prueba de que si lo harás, ella fue por una maquina y se paró frente a mi, ¿quiero que lo pidas primero!, no puedo hacerlo, me da pena, ¡Lili, quiero que lo rapes todo!, Lili me preguntó: ¿puedo hacer eso!, Si, fue mi respuesta con voz cortada, Cindy se giró y se puso la maquina en la base del cuello, se pasó la maquina hasta la coronilla y luego se la dio a Lili, ¡lo quiero bien peladito!, le pidió a doña Laura que le cortara todo el pelo y se sentó frente a mi, le pusieron la capa y pude ver como caía su pelo, Lili inclinó mi cabeza al frente y pasó la maquina desde mi cuello hasta la coronilla, aquello me provocó una erección bajo mis pantalones, la maquina subió varias veces quitando los casi dos centímetros que me quedaban pero a Cindy le estaban quitando más, ambos sonreíamos y Andrea dijo: ¡están locos!, cuando le quitaron los lados y parte posterior doña Lau me dijo: ¿quieres terminar tú el corte?, le dije que si, Lili dijo que dejaría la parte superior también, no tardó mucho en dejarme lo mismo que a Cindy, esta se levantó de la silla, fue hasta mi, me miró a los ojos y sonrió, Lili le entregó la maquina y le explicó lo que tenía que hacer, ella probó encendiendo la maquina, una vez que se acostumbró a la vibración, pasó su mano por mi cabeza, puso una mano en mi nuca y con la otra colocó la maquina sobre mi frente, la llevó hasta atrás lentamente y dijo: ¡esto es increíble!, se siente genial, dio la siguiente pasada y pareció mas contenta, continuó pasando la maquina hasta terminarse el pelo, luego la siguió pasando cuando se dio cuenta de que no me cortaría, Lili le dijo que se la devolviera para terminar el corte, Cindy se la dio pero se veía que tenía ganas de seguir cortando, Lili terminó de pasar la maquina por toda la cabeza y me aplicó crema de afeitar en el contorno para que tuviera forma el corte, cuando acabó me quitó la capa y dijo: ¡ya estás listo!, pasó su mano por mi cabeza y luego me giró hacia el espejo para que pudiera verme, mis ojos se destacaban mucho, no tenía una cabeza de tamaño perfecto para el corte pero por mi rostro no me veía nada mal, me agradó y di las gracias, Cindy se sentó en la silla, Lili le puso la capa y me pasó la maquina, me dio consejos para poder cortar el flequillo y decidí cortarle primero todo el flequillo, pasé la maquina con cuidado de derecha a izquierda y lo mandé todo a la capa, ella no dejaba de sonreír, Lili le dijo: ¿sabías como te verías rapada?, sí, busqué formas para visualizarme así, por eso me animé a proponerle esto a él, Lili le dijo que era demasiado astuta, le dije que era una tramposa mientras le pasé la maquina desde la frente hasta atrás, aquello me dio una satisfacción increíble, ella sacó una mano debajo de la capa y la estiró para tocarme ahí abajo, la escondió nuevamente y continué pasándole la maquina, cuando casi terminaba escuchamos que se encendió la maquina y al voltear vimos a doña Laura pasándole la maquina a Andrea, nos dijo que no se quería quedar atrás y no le importaba lo que le dijeran, que tal vez no tendría otra oportunidad y que terminaremos lo nuestro, seguí pasando la maquina por la cabeza de Cindy, entendí lo que ella sintió cuando se acabó el pelo para cortar y le di la maquina a Lili, ella se apuró para asegurarse de que no quedara nada, también afeitó el contorno de Cindy pero dando otra forma para que se viera diferente, le quitó la capa y Cindy se puso muy contenta al mirarse en el espejo, doña Laura dijo que quien le cortaría la parte posterior a Andrea, yo pedí la maquina y le corté esa parte, Cindy se encargó de la parte superior y después doña Laura terminó el corte. Nos tomaron una foto a los tres y nos dijeron que si queríamos el video fuéramos al día siguiente, no podíamos creer lo que hicimos y Andrea dijo cuando estábamos afuera: ¡vamos a estrenar el corte de el nuevo hombre de la escuela!, fuimos a su departamento y estuvimos haciendo cosas que yo no imaginaba, al día siguiente ellas llamaron demasiado la atención por sus cortes y a mi muchas compañeras me dijeron lo bien que me veía.
Después de la graduación le pedí a Cindy que fuera mi novia y aceptó aunque dijo que se encargaría de mis cortes en el futuro…



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