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vecina extraña y nueva jefa by FCM Historias



Llevaba varios años viviendo en la misma colonia, había una vecina muy guapa, era de mi edad, de test blanca, alta, rubia, iba mucho al gym, siempre que me iba al trabajo me la encontraba, solía saludarme pero se rumoraba que ella era bastante extraña, pero parecían ser puros rumores, Nadie te sabía decir que era lo extraño en ella y a mi me parecía muy normal.
Un día en el que iba llegando del trabajo, noté que le habían entregado algún paquete o algo por el estilo, ella estaba firmando, escuché algo pero con el ruido del vehículo se distorsionó, luego de que se alejó el camión, ella me tocó del hombro y me hizo mirarla, le pregunté si necesitaba algo, ¿podrías ayudarme a mover unas cosas?, están algo pesadas, ¡te recompensaré por tu ayuda, decidí ayudarla, fuimos a su casa, ella estaba contenta de que la fuera a ayudar, entramos a su casa y había unas cajas,, no parecían ser la gran cosa pero entendía que ella no quisiera cargar sola, le ayudé a llevarlas al sótano, cuando terminé me ofreció tomarme algo, me dio una coca, ¡soy muy despistada!, no me presenté contigo, mi nombre es Sandra, pero puedes llamarme Sandi, hablamos un poco, le dije en que trabajaba, se sorprendió al saber que era algo sobre programación, hizo un montón de preguntas y me dijo que si podía ayudarla cuando necesitara ayuda con esas cuestiones, le dije que no tenía problema con ayudarla, después de unos minutos me despedí de ella pero antes de que me fuera me pidió mi numero, se lo di sin problemas, luego me dejó ir y continué con mis actividades del resto del día.
Pasaron unas dos semanas desde que ayudé a Sandi, ella me marcó para ayudarle a mover otras cosas, pensaba que me empezaría a utilizar como cargador personal, le dije que no había problema, dijo que me esperaría en su casa a la hora que regresaba de mi trabajo. Aquel día no fue nada pesado, regresé a casa de buen humor, luego fui con Sandi para ayudarle con las cosas, cuando toqué su puerta tardó en salir pero fue corriendo a abrirme, pude darme cuenta de que cargaba ropa deportiva, me pidió perdón por estar de esa manera pero tenía pensado ir al gym, a pesar de que no era ropa ajustada se podía notar que tenía buen cuerpo, me distraje con eso, ella me hizo pasar a la casa, me llevó hasta el lugar en que tenía las cajas y le ayudé, estas estaban un poco mas pesadas, cuando las bajamos al sótano pude darme cuenta de que las otras cajas aún no eran abiertas, pero no quise preguntar nada, cuando terminamos hablamos un poco y no me di cuenta de la hora, ya iba tarde para irme al gym, ¿vas al que está cerca?, no, voy al otro más lejano, ¿no te conviene ir aquí cerca?, es que al otro van algunas amistades del trabajo, me pidió que fuera ese día con ella, pensé en decirle que no, pero logró convencerme, me fui con ella al que estaba ceca y la verdad me sorprendió bastante, entendía que era entretenido ir con mis compañeros pero aquel lugar no tenía nada que envidiarle al lejano, al salir me dijo: ¿podemos venir juntos si quieres¿, creo que si es buena idea, aunque debo esperar para que se termine la mensualidad y no desperdiciar dinero, ella lo entendió y no dijo nada mas, regresamos a casa, me la había pasado bien con Sandi, le dije que esperaba que se volviera a repetir…
El din de semana antes de salir del trabajo recibí un mensaje de Sandi, ¿quieres tomar algo hoy?, claro, ¿a dónde quieres ir?, prefiero que sea en mi casa, no tengo ganas de salir, ¡llegaré después del trabajo entonces!, de camino a casa me detuve para comprar algunas cosas, llegué a casa de Sandi con cervezas y botanas, ella me recibió muy contenta, me pidió la bolsa para llevarse las cervezas pero no se la di, preferí sacar dos y llevar las otras al refrigerador, , ella había preparado botanas con algunas carnes y queso, nos comimos eso primero, en la conversación ella bromeó con que mi cabello era muy largo, que si en dónde trabajaba no había reglas de apariencia, le dije que si había pero con lo bueno que era me habían dado libertad de eso, a ella le pareció interesante, - ¿entonces antes de que demostraras tu capacidad si te hicieron seguir las reglas?, le dije que hasta cierto punto, al principió si me hicieron recortar mi cabello hasta lo máximo permitido, pero ya conforme vieron mi trabajo me permitieron mas libertad, a ella le hizo gracia, le confesé que algún cliente de la empresa a veces tiraba indirectas a los jefes, les decían que debían ponerme reglas antes de que los otros siguieran mi ejemplo, por suerte mi trabajo hablaba por mi, así que no era tan necesario que me obligaran a algunas cosas, -¡ojalá algún día quieras cortarlo!, me agradaría verte de otra manera, le dije que tomaría en cuenta su opinión pero que no le prometía hacer nada, estuvimos el resto de la noche botaneando y tomando cerveza, la pasamos muy bien, me quedé dormido en su sillón. al día siguiente cuando me desperté olía a hot cakes, me acariciaron la cabeza por detrás, -te veías muy lindo dormido en el sillón, me hubiera gustado tener las cosas para cortarte el cabello mientras dormías, me disculpé por haberme quedado dormido, ella me invitó a almorzar y no pude resistirme a quedarme, la verdad es que los hot cakes estuvieron muy ricos, le ayudé a lavar los trastes y me fui para mi casa, acordamos que de vez en cuando se repetiría aquello.
Habían pasado varios meses desde que me había empezado a llevar con Sandi, las cosas iban bien entre nosotros, yo me había cambiado de gym, solía ir muchas veces con ella, hice nuevos amigos en aquel lugar, Sandi me presentó amigas suyas, parecía costarme menos socializar desde que la conocí, pero no sabía que pronto pasarían cosas en el trabajo.
Un día mientras todo iba bien en el trabajo, llegó el jefe junto con su hija, nos presentó a la chica, era bastante atractiva, de cabello muy corto, parecía muy seria, no estaba nada mal, tenía ojos cafés, cabello oscuro, era alta y no tenía nada mal cuerpo, nos saludó muy amablemente, el jefe dijo que ella entraría en la empresa, pretendía que ella tomara el control en un futuro cercano, nos advirtió que podía haber reglas que cambiarían, pero no me preocupé, una compañera se acercó cuando se fueron a la oficina del jefe, -¡ahora si te van a quitar ese bonito cabello!, comenzó a reírse, -¿que te hace pensar eso?, -¿no le viste el corte?, eso es clara señal de que no tiene miedo a dejarse tan corto el de ella, si te pide que sigas las reglas no tendrás justificación valida para no hacerlo, aquello me puso a pensar, mi compañera acarició mi cabello nuevamente, -¡espero que sea pronto y que me inviten a ver la masacre!, pensé que estaba loca, después de unos minutos dejé de pensar en lo que dijo.
Seguí teniendo encuentros con Sandi, aunque había cosas que yo no sabía de ella y no lograba preguntarle, por un momento llegué a pensar que muchos de los rumores que se decían eran ciertos, pero aún así seguí juntándome con ella, incluso pensaba que podía llegar a volverla mi novia. Un día en que nos juntamos en su casa para tomarnos algo me armé de valor, le pedí que fuera mi novia, dijo que no, pero comenzó a reírse, yo no le encontraba la gracia, -¡solo salgo con chicos de cabello corto!, aquello cayó como balde de agua fría, entendí algunas cosas de las que hablaban sobre ella, le pedí que hiciera una excepción pero no quiso, luego de un momento de silencio incomodo me dijo: ¡no te lo tomes a mal!, se levantó de donde estaba sentada, fue detrás mío, acarició mi cabello, ¡me gusta mucho!, no podría obligarte a cortarlo, aún sabiendo que es lo que impide nuestra relación, tengo un fetiche, ¡me encanta ver como se corta el cabello!, me abrazó, perdón, pero tengo razones fuertes para no andar contigo, la verdad teníamos bastante alcohol dentro y no hubo problema con nada de lo que me comentó, hasta olvidé algunas cosas que dijo, seguimos tomando otro rato y quedé dormido como siempre…
Un mes después de haberle pedido que fuera mi novia a Sandi, llegó por la mañana muy contenta la hija del dueño de la empresa, nos comunicó que habría nuevo reglamento a cumplir, dijo que iríamos pasando por partes, a una sala de juntas y ahí fue avisando el reglamento, la mayoría fueron en grupos conforme los llamaron y de pronto llegó la hija del jefe hasta mi, me pidió que dejara un rato mi puesto y que fuera con ella, la seguí hasta su oficina, cerró la puerta, me hizo sentarme y comenzó a hablar:
Me dio las gracias por todo mi trabajo, dijo que dentro de una semana ella pasaría a estar a cargo de la empresa, su padre quería empezar a descansar por eso se quedaría a cargo, comenzó a darme las reglas de vestimenta y de todo lo demás, cuando parecía que ya había terminado me dijo: ¡tengo un detalle contigo, -¿cual¿, -¡necesito que te cortes ese cabello!, fue un golpe duro, pensé en lo que me dijo mi compañera cuando había llegado por primera vez la hija del jefe, -no es nada personal, pero considero que saltarse la regla del corte puede crear inconformidad en los demás y hacer que no se desempeñen adecuadamente, sé que te lo ganaste con tu trabajo, comprendo lo que hizo mi padre, pero para mi es muy importante que todos se sientan iguales en cuanto a permisiones, metió su mano en mi cabello y me felicitó por lo bonito que estaba, -¡espero que se corte muy pronto!, tienes toda la semana para acudir a algún lugar para cortarlo, si vienes así el próximo lunes tendré que darte tu finiquito, le pedí que me dejara conservarlo pero fue muy directa, -¡tengo a alguien mas para tu puesto!, no es tan bueno como tú pero puede terminar mejorando, será tu decisión, ¡te prometo que te verás muy bien con el corte, no firmé lo que me pedía porque eso era hasta que cumpliera con su regla, me despedí de ella y regresé a mi lugar de trabajo, anduve demasiado pensativo durante ese día. Por la tarde Sandi me vio extraño, tuve que contarle lo que pasaba y comenzó a reírse, me dijo que no veía el problema, que lo hiciera y listo, le expliqué lo importante que era mi cabello, -entonces espera a que termine la semana, recibes tu finiquito y buscas otra cosa, pero no te obsesiones con el tema, una de sus amigas nos escuchó, -¡te vas a ver muy lindo de cabello mas corto!, le di las gracias pero me rehusaba a cortarlo, así anduve durante el resto de la semana, el viernes me encontré con la hija del jefe, espero que aproveches el fin de semana para ir a la barbería, ¡eres muy bueno como para irte solo por tu cabello!, ojalá si vengas el lunes, se despidió de mi, me fui a casa, pasé por Sandi para ir al gym, se subió al carro,-¿vamos a la barbería o que?, vió mi cara y decidió no bromear, -entiendo perfectamente como te sientes, a mi también me da miedo cortarme drásticamente mi cabello, mi madre me decía que me vería horrible si lo hacía, por eso nunca lo he hecho, esa es una de las razones por las que me salí de casa de mi madre y hasta la fecha no he perdido ese miedo llegamos al gym, acarició mi cabello y se bajó mientras me estacionaba, la alcancé adentro, estuvimos entrenando un rato, logré andar tranquilo durante todo ese tiempo, en el camino a casa Sandi dijo: ¡mañana es sábado!, vamos a hacer algo para que no andes triste, dijo que fuera a su casa como a las 12, que ahí decidiríamos que hacer, acepté su propuesta y la dejé en su casa…
Aquel día no pude dormir bien, almorcé, decidí salir a caminar un poco, regresé y fui a casa de Sandi, ella estaba algo arreglada, fuimos a comprar cosas para comer, compramos lo necesario para hacer cocteles de camarón, algunas otras cosas y regresamos a su casa, preparamos los cocteles algo mas tarde, estuvimos viendo películas, casi no tomamos nada, por la noche me quedé a dormir en su casa, al otro día me invitó a almorzar, cuando me iba me pidió que me quedara, anduvimos jugando cartas, apostábamos poco dinero, ¡hay que apostar el cabello!, andaba contento pero no accedí a hacerlo, seguimos apostando dinero, ella me ganó varias veces, -¿aún están las cervezas en el refri!, -sí, podemos preparar carne de la que compramos, le ayudé a cocinar, la estábamos pasando bien, las cervezas iban haciendo su efecto y a las ocho de la noche ya andábamos algo alegres, ella fue al baño y cuando volvió se paró frente a mi, ¡somos unos cobardes!, tomó mi cabello, ¡si tu lo haces yo lo hago!, le dije que estaba loca, ella insistió, de pronto dije: ¡al carajo!, ¡vamos a hacerlo!, me quitó las llaves del carro,, nos subimos, la miré, -¿estás segura de esto?, solo me sonrió, -¡no creo que sea tan malo!, encendió mi auto,, condujo hacia un lugar cercano, al llegar me dijo: ¿vamos!, le dije que si, nos bajamos del auto, iba saliendo una chica del lugar cuando entramos, el lugar era agradable, las paredes eran azules, los sillones de espera blancos, una silla de corte blanca, y los muebles para las herramientas de corte también eran blancos, la chica estaba barriendo, luego saludamos y cuando volteó se me hizo conocida, era de test blanca, cabello largo pero con flequillo por arriba de las cejas, ojos cafés, no muy alta aunque de buen cuerpo, saludó a Sandi, se presentó como Karla, luego me dijo: ¿no eres el que va al gym de aquí cerca?, le dije que si, Sandi le explicó el motivo de que estuviéramos ahí, ella dijo que pensaba cerrar en ese momento, le dijimos si teníamos que irnos pero me pidió que le ayudara a bajar la cortina, terminó de barrer, -¿quien de los dos va primero?, arrojamos un volado, Sandi perdió, se sentó, -¿quieres elegir mi corte?, me sorprendió mucho eso pero acepté, pedí que le cortaran el flequillo, y lo demás ellas lo podían decidir, la chica fue por las tijeras, comenzó a cortar el cabello, le cortó mucho a Sandi, luego midió su flequillo, la giró para mostrarme hasta donde cortarlo, lo primero fue hasta la altura de la boca, Sandi le dijo que era mucho, Karla se dió cuenta de como estaba y le dijo que faltaba, llegó a la nariz, me dijo: ¿así es suficiente o mas?, le dije que más, Sandi dijo que se desquitaría, cortó a la altura de sus ojos, Sandi tenía cara de preocupada, Karla me vió, -¡yo se que quieres hasta aquí, puso los dedos a la altura de las cejas, asentí con la cabeza, Sandi tuvo que aguantarse, Karla lo fue cortando incluso un poco hacia atrás para que resaltara mas su cara, cuando terminó, le quitó la capa, la dejó tocarse y dijo: ¡desgraciado!, prepárate para mi venganza, antes de levantarse Karla le pidió que se calmara, que se veía muy bien, le permitió verse en el espejo, le gustó, se calmó un poco, fue por mi, me arrastró hasta la silla, ella me puso la capa, le dijo a Karla que se deshiciera de todo, yo puse una cara de tristeza, luego dijo que era broma, me calmé, le mostró una foto a Karla, esta estuvo de acuerdo, procedió a mojar mi cabello con la pistola de agua, luego comenzó a cortar la mitad, tardó un rato, continuó cortando bastante mas, luego fue cortando los lados algo cortos con la tijera, lo de arriba quedó algo mas largo para acomodarlo de lado, cortó un poco mas los lados y parte posterior, -¡te dije que te verías bien sin tanto cabello;, reconocí que era la del gym, no sabía que fuera estilista, utilizó otras tijeras para darle mas forma a la parte de arriba, sacó una maquina y la pasó sobre un peine y de forma rara, cuando quedó conforme sacó una maquina pequeña, hacía cosquillas, con esa fue limpiando el contorno del corte, le dió forma a las patillas, afeitó esa parte con una navaja y luego me pasó un cepillo con talco, me quitó la capa, ¡ya estás listo!, Sandi me miró -¡hasta tu jefa te va a tirar la onda mañana!, le di las gracias a Karla, dijo que esperaba que fuera cliente mas frecuente y que le llevara a Sandi mas seguido para mantener su corte, no quiso cobrarnos, nos fuimos a la casa de Sandi y tomamos otro rato, no podíamos creer que nos cortamos el cabello, me fui para mi casa. Al siguiente día fui al trabajo, mis compañeras estaban contentas de verme con el nuevo corte, la jefa me pidió que pasara a su oficina, entré algo nervioso, -¡me agrada tu corte!, pero no es lo suficientemente corto para quedarte en la empresa, le pedí que lo considerara, -lo haré, ¡pero no creo que sea suficiente!, anduve molesto el resto del día, quería largarme del trabajo, le conté a Sandi lo que había pasado, ella me dió un masaje, luego fuimos al gym, regresamos a su casa, me pidió que la acompañara a su sótano, estaba muy enojado y entramos, ella no encendió la luz rápido, estaba intentando orientarme en aquel cuarto oscuro, sentí que me amarraron, me sentaron en una silla, cuando se prendió la luz estaba frente a un espejo en la pared, sentado en una silla cómoda de corte, -¿que te parece mi cuarto para cumplir mi fetiche?, en ese momento entendí para que eran las cosas que bajamos al sótano, ella se paró detrás de mi, acarició mi cabello, -¡vamos a cumplir con la condición de tu jefa?, le pedí que me soltara pero no había forma de que lo hiciera, fue hacia su mueble de color negro, sacó una capa, se acercó para colocarla, le pedí nuevamente que me soltara pero se negó a hacerlo, mi cabello ya no era tan largo como antes pero quedaba suficiente para dejar una gran cantidad en el piso, ella fue por una maquina, le puso un protector, acarició mi cabello al volver, -¡ya te hacía falta un buen corte¡, -¡no te bastó con el de ayer?, -¡no!, encendió la maquina para intimidarme, se comenzó a reír, se paró detrás, puso la maquina en la base de mi cuello, comenzó a deslizarla hasta arriba, yo pensaba que me daría algo en ese momento pero no sentí que cayera demasiado cabello, eso me puso contento, ella siguió dando pasadas mientras yo trataba de no mostrar mi sufrimiento, cuando se pasó a mi lado derecho, llevó la maquina desde mi patilla hasta la sien, seguí pensando que no estaba tan mal la cantidad de cabello que caía, -¿sabías que conozco a tu jefa?, aquello me dejó sorprendido, no pude decir nada, -le cobraré por el favor que le estoy haciendo, le ahorraré perder a su mejor trabajador, ¿no crees que soy muy buena amiga?, yo seguía en shock por enterarme de aquello, siguió dando pasadas hasta pasarse al lado izquierdo, comenzó detrás de la oreja para no hacer idéntico el proceso, yo me sentía raro pero no estaba seguro de lo que me pasaba, muy pronto mi lado derecho quedó igual que la parte posterior, -¡es muy divertido cortar tu cabello!, -¿lo habías hecho antes?, -no, es la primera vez, he visto muchos tuturiales por youtube pero no había tenido oportunidad de intentarlo, sentí que eso no era buena señal, pero no podía salir corriendo, fue a cambiar el protector de la maquina, volvió a comenzar por la parte posterior, inclinó mi cabeza para iniciar, aquello se sintió diferente, la cantidad de cabello no era tanta o al menos eso pensaba, aunque en realidad era la mitad de lo que me quedaba, parecía estarme excitando, no le pensaba decir nada a ella, pude verla disfrutando mucho, se siguió cortando detrás de mi oreja derecha, luego desde la patilla hasta la sien, cada pasada se sentía mejor, pero estaba perdiendo lo que por muchos años mantuve con orgullo, se pasó a mi lado izquierdo y comenzó desde la patilla, con cada pasada yo deseaba que no terminara a pesar de lo que estaba sufriendo, cuando ella quedó conforme apagó la maquina, pasó su mano para presumir lo que había hecho, fue hacia el mueble por un protector, se lo puso a la maquina y regresó, -¡vamos con mi parte favorita!, metió sus dedos entre mi flequillo, encendió la maquina, entendí que comenzaría con la parte superior y cuando la maquina estaba casi en mi frente, eché la cabeza hacia atrás, a le sorprendió lo que hice pero comenzó a sonreír, seguí estirando la cabeza hacia atrás para que no me cortara nada, ella me jaló bruscamente del flequillo, llevó mi cabeza al frente, no moví el cuello para evitar que aquello doliera demasiado, clavó la maquina a la mitad de la parte superior y la deslizó hacia atrás, se dió cuenta de que no pondría mas resistencia, con los dedos entre mi flequillo empujó mi cabeza hacia atrás, -¿esto era lo que querías verdad?, le negué con la cabeza pero a ella no le importó, colocó la maquina en el centro de mi frente, la maquina se deslizó hasta atrás, dió una segunda pasada, le pedí que no fuera tan brusca, me soltó, mi cabeza quedó en un punto medio, puso una mano sobre mi nuca, acarició rápidamente y luego con esa mano hizo que mi cabeza no se echara hacia atrás mientras ella seguía dando pasadas desde mi frente hasta atrás, yo cerré los ojos, se burló de mi, aunque no sabía que yo estaba teniendo una erección bajo la capa, siguió cortando hasta que todo quedó parejo, fue a cambiar el protector y repitió el proceso, aquello me estaba volviendo loco pero no quería decirle que me estaba gustando, terminó bastante rápido, volvió a cambiar el protector de la maquina, esta vez lo fue pasando muy lento, yo creía que me correría bajo la capa pero no fue así, cuando terminó pasó la maquina por toda la cabeza, sacó otra maquina, me dijo que no estaba segura si podía darle forma al contorno, aunque luego recordó que su amiga había afeitado esa parte, aprovechó eso para solo dar unos retoques y terminó, regresó con un peine extraño, lo pasó por toda mi cabeza y luego me quitó la capa con cuidado, -¡ya estás listo!, me levanté de la silla después de que me liberara, no me desagradó tanto lo que había hecho, con mi mano toqué para sentir mi cabeza, quedaba muy poco cabello pero quedaba algo, se acercó, me acarició la cabeza y me dió un beso, yo estaba sorprendido, la seguí besando, cuando metí mis dedos entre su cabello, -¡me desquitaré algún día!, -¡ayer cortaron mucho!, ya estamos a mano, se dió cuenta de mi erección, -¡vamos a hacer algo con esto!, me tomó con la mano el pene, -¿cual es tu idea?, -sígueme, fuimos a su cuarto, me tiró sobre la cama y me dió una mamada, después tuvimos relaciones, fueron las mejores de mi vida....

Al día siguiente llegué bastante mas temprano al trabajo, fui a mi lugar, comencé a revisar las cosas pendientes, estaba distraído cuando entró mi compañera de trabajo, se paró frente a mi para observarme, luego me tocó para que la mirara, tenía una sonrisa enorme, -¡te vez muy bien!, te invitaría a salir si no fueras tan serio, se estaba riendo cuando le dije: ¿crees que ahora si me quede con el trabajo?, -¡claro que si!, no tengas duda de eso, acarició mi cabeza, -si decides dejarlo volver a crecer para cortarlo o raparte, ¡quiero ser quien lo lleve a cabo!, le dije que la buscaría si pasaba cualquiera de las dos cosas, continué con mis cosas cuando pasó la jefa, me miró asombrada, me sonrió, entró a su oficina y después de unos minutos llegó a mi lugar, me pidió que fuera a su oficina, esperé a que se diera la vuelta, me levanté, caminé detrás de ella sin hablar, ella me dejó pasar, cerró la puerta, luego pasó detrás mío, acarició mi cabeza, me felicitó por haber dado el siguiente paso, -conoces a Sandi?, me dió una descripción rápida, le dije que si, se quedó pensando un poco, -Ya diste el paso que yo necesitaba, solo falta un detalle, no creo que tengas problema para cumplirlo, -¿cual es ese detalle?, -¡Sandi no te hizo el corte que prometió!, no sé si tuvo miedo o cual es el motivo pero si quieres tu puesto déjame terminar el trabajo, toqué mi cabeza, -¿no es demasiado corto ya?, hasta mis compañeras de trabajo me dijeron que es muy corto, comenzó a reírse, -¡no me mientas!, yo pregunté con las chicas si sería muy cruel lo de hacerte cortar el cabello, ¡me dijeron que no!, también dijeron que les agradaría verte rapadito o casi rapadito, lo máximo era con la parte superior a un numero 2, todo parejo o con los lados mas cortos, me quedé mirándola sin decir nada, ella abrió un cajón , sacó unos papeles, me los pasó, me pidió que leyera la parte que hablaba sobre el corte y vestimenta, después de leerlo entendí los cortes de mis compañeras y compañeros, no sabía que decir, sacó de su bolsa una maquina, -¿voy a quedarme con mi trabajador estrella o prefieres irte?, la verdad es que me causaba mucho morbo ver a mi jefa queriendo cortarme el cabello que faltaba, quería irme de ese lugar pero mi subconsciente me traicionó, cuando volvió a preguntar, ¿aceptas el trabajo?, asentí con la cabeza, la miré a los ojos y le dije: ¡si lo acepto!, ella se puso contenta, me llevó del brazo a una puerta, la abrió, ahí tenía un baño con una silla que utilizaba para arreglarse, me llevó hasta la silla, me sentó y luego sacó una capa que tenía guardada, me la colocó, encendió la maquina, el zumbido me causaba escalofríos, con una mano inclinó mi cabeza, con la otra comenzó a llevar la maquina desde la base de mi cuello hasta la coronilla, aquello no se sentía nada mal, comencé a excitarme, siguió dando pasadas, podía verse su sonrisa mientras daba pasadas en la parteposterior, cuando comenzó con mi lado izquierdo no habíamos cruzado palabra, ella siguió con lo suyo y yo disfrutaba del corte, terminó con mi lado izquierdo y se pasó al derecho, cuando cortó desde la patilla hasta la sien me dijo: ¡desde que te vi la primera vez quería hacer esto!, -¿por qué no me lo dijo?, -me dio pena, cuando hablamos del tema quería que me pidieras acompañarte para supervisar el corte, o quizá me preguntaras si sabía cortarlo, no tenía ni idea de todo esto, yo esperaba poder convencerla de que me dejara conserrarlo, tenía miedo de intentarlo, -cuando me enteré de que lo hiciste alcoholizado me me sentí bien, pero estaba molesta, ¡quería ser yo quien lo hubiera cortado!, parecía tener mucha idea de como hacerlo, -¿puedo saber como aprendió?, -¡fui a unos cursos hace tiempo!, me quedé sorprendido, se disculpó por lo siguiente con una mano puesta en mi nuca me pasó la maquina por la parte superior, aquello se sentía muy bien, -¡espero que podamos llevarnos bien después de esto!, mi padre me habló maravillas de tu trabajo, tuve miedo de que decidieras marcharte con mi norma del corte, -¡estuve cerca de hacerlo!, ella solo se rió un poco y continuó pasando la maquina hasta dejarlo todo parejo, la pasó nuevamente por toda la cabeza, me dijo que esperara, fue a buscar algo, regresó y comenzó a ponerme crema de afeitar en el contorno, -¿así se verá más limpio el corte!, la aplicó por el contorno y me afeitó con cuidado, cuando terminó me limpió los restos de la crema, me pasó un cepillo extraño con talco, me quitó la capa, acarició mi cabeza, -¡ya estás listo!, toqué mi cabeza, sentí que quedaba menos cabello que antes, era extraña la sensación, -lo dejé todo con el numero 2, si quieres puedo dejarlo más corto a los lados, incluso podría pasarte la 1 por toda la cabeza, ¡tienes muy buenos rasgos y se destacarían mucho!, -¡lo pensaré!, fuimos a firmar mi contrato, puedes dejarlo crecer si quieres, pero hay una condición, en cuanto yo considere que es excesivo puedo cortarlo a mi gusto, o en su defecto, tendrías que pedirle a una compañera que te acompañe para asegurarme de que quede como yo elija,firmé el contrato, tenía un aumento de sueldo y me retiré de la oficina para seguir trabajando, mi compañera al verme fue a acariciar mi cabeza, -¡me encanta!, tienes que mantenerlo así por favor, o déjame raparte por completo, solo le dije que ella tendría que dejarse hacer algo si quería que yo me dejara rapar, dijo que lo pensaría.
Por la tarde fui al gym con Sandi, ella no dejó de decir que le encantaba mi corte, regresamos del gym, nos encontramos con mi jefa y nos quedamos en casa de Sandi para tomar algo, le contó como me amarró para cortarme el cabello, hablamos un buen rato, al irse mi jefa dijo: ¡espero que tomes en cuenta mi propuesta de darle mantenimiento a ese corte, le dije que lo pensaría y me quedé con Sandi para ser premiado por mi corte, ella me rasuró abajo y tuvimos relaciones aún mejores que el día anterior…



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