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Mi primer corte forzado real by ilhcts


Durante mis casi 40 años cortando el pelo he vivido muchisimas situaciones de cortes forzados, algunas las he compartido aqui, otras están en mi memoria, pero debo reconocer que absolutamente todas fueron forzadas, no por mi. O sea, he sido el ejecutor de cortes forzados, por multiples y diversas situaciones: padres enojados, comienzo de clases, cumpleaños numero 18 (años atras en Argentina era costumbre obligatoria que te cortaran el pelo por la fuerza o tus amigos o el peluquero del servicio militar) trabajo nuevo y nuevas reglas, colegio nuevo y nuevas reglas, apuestas perdidas y muchas mas. Situaciones placenteras para mi, algunas mas que otras, y no tanto para las víctimas.
Lo que nunca había vivido hasta hace poco mas de un año, fue ser el ejecutor primario y principal de un corte que paso a contarles.
Muchos años atras, un adolescente, seguramente con una fijacion por los cortes de pelo como la mia, se acercó a mi peluqueria a última hora antes de cerrar. Tenía el cabello ondulado y largo, atado le pasaba por debajo de sus hombros. Me dijo que solo queria hablar, y que estaba pensando en un corte de cabello, solo un poco, pero no estaba decidido aún. Entre muchas charlas, le ofreci solo lavarle el cabello y ver como estaba, si necesitaba un corte y tratar de convencerlo de que se lo haga. Era muy obvio que disfrutaba de cada segundo de mi lavado y masajes de toda su cabellera, y por un momento mi morbo subió tanto que tuve el coraje de decirle: Y si en este momento uso mis tijeras y te corto todo tu pelo? no podrias hacer nada... Me pidio casi en un susurro que por favor no lo hiciese, y como soy muy complaciente con todo el mundo, ni lo intenté. En realidad yo solo bromeaba, le dije, y todo quedó ahí. A los 2 dias regresó y me pidió que cortara todo su pelo, muy corto, lo cual ya no disfruté tanto, era muy voluntario para mi gusto. Era evidente que él esperaba que lo fuerze esa noche y no lo supe entender, y me reproché siempre el no haberlo hecho.
Como 10 años mas tarde, conozco a quien hoy es mi marido por la app que todos usamos, que en ese momento era un hermoso adolescente de 18 años. Desde nuestro primer chat hasta que nos conocimos personalmente transcurrieron unos 5 meses, porque no viviamos cerca, y desde el primer momento le conté que era peluquero y que por supuesto, yo sería su estilista. Le pedí que por favor no se cortara el pelo hasta que nos encontraramos y me aseguré de que en nuestra primera cita me dejase cortarle el pelo. Para el nunca fue un problema permitirme que le hicese en su cabeza lo que me gustara, lo cual siempre le agradecí, pero nunca tuve mucho entusiasmo, dado su entrega voluntaria a mis designios. He probado todos los estilos, colores y formas para su cabellera, siempre dentro de lo normal, y en un momento despues de unos años,(llevamos juntos 7) se volvió tan rutinario para mi que hasta accedí que alguno de mis amigos barberos le corte el pelo. Sin darme cuenta y al no prestarle yo tanta atención, su cabello comenzó a crecer y crecer y él comenzó a enamorarse de su cabello largo.
Antes de continuar debo confesar que después de sospechar y notar algo raro en mi acerca de su cabello, o de mi deleite al cortar, terminó descubriendo mi fetiche, lo cual fue un poco dificil y vergonzoso para mi, pero liberador al mismo tiempo. Dejó de ser un tabú y pude con libertad expresarme sin tener que esconderle nada. El por su parte fue muy maduro para su edad y simplemente lo tomó como que cada quien con sus gustos y nunca preguntó nada mas.
Pasaron casi 2 años desde que dejé de cortarle el pelo y como sabrán algunos de los que estén leyendo esto, que lo vieron en fotos, su cabello estaba muy largo, pasando sus hombros, de unos 25 cms. No recuerdo en que momento de su proceso de crecimiento del pelo, comenzé en secreto a fantasear con la idea de cortarselo y eso me exitaba muchísimo. Jugaba en mi mente distintas situaciones en las que lo forzaria, o lo llevaría a una peluqueria a que lo pelaran. Hice eso durante meses, y peleaba con varios fantasmas en mi cabeza. Uno es que lo quiero demasiado como para hacerle algo que no quiera y por el momento no quería cortarse el pelo. Otro fantasma es que disfrutaba mucho de esa fantasía y en cuanto se lo cortara, ya no la tendría.
Una tarde pasábamos frente a una barbería y de repente dice: y si me corto el pelo? Fue un shock para mi, y muy bruscamente le digo: nunca en tu vida se te ocurra cortarte el pelo con otro que no sea yo, sin avisarme!! Quedó un poco preplejo por mi reacción, y como es muy sumiso, no volvió a tocar el tema hasta que otra tarde me dice: me está molestando un poco el pelo tan largo, creo que ya me lo quiero cortar. Tuve que comenzar a pensar que mi fantasía estaba por terminar, y me decepcionaba un poco que voluntariamente me pida un corte y yo lo hiciera como todas las veces. Para mi suerte, no fue asi, porque a los pocos dias volvió a decir que le molestaba el pelo pero que no se decidía todavía a cortarlo, que le daba lástima porque le había llevado mucho tiempo para tenerlo asi de largo y que aún no estaba dispuesto a perderlo. También tengo que agregar que ademas de la fascinacion que me generaba la fantasía de forzarlo a un corte, me encantaba como le quedaba el pelo largo y me daba lástima perder esa imagen.
Pasaron unos pocos dias, estabamos acostados, tocandonos un poco y con ganas de sexo, cuando no se porqué, la historia que tuve con ese joven hace años, al que deje escapar de un corte forzado, volvió a mi mente como un dejavú, y en segundos pensé, es ahora o nunca. Lo abrazé fuerte y le dije en el oído, levantate, te voy a pelar!!
Asombrado, exitado y sumiso solo dijo ok, y desnudo se sentó a esperar que buscara mis herramientas. Me senté en la misma silla y lo senté encima de mí, estábamos muy exitados los dos, y para completar mi extasis, me dice muy bajito (seguro sabiendo que eso me gustaba) no quiero que me peles... bajó su cabeza, me besó y luego se arrodilló frente a mi y mientras jugaba con mi pene agarré las tijeras y sin piedad comenzé a cortar salvajemente, sin medir, solo cortaba y cortaba y lo dejaba caer sobre sus hombros desnudos.
Me costó un poco ver sus lágrimas, queria cortarse el cabello pero no raparse, sin embargo la exitación pudo con los dos. Yo estaba al tope de mi climax ofreciendole una experiencia como pocas habiamos tenido, y él en su sumisión optó por disfrutar y dejarme hacer. Le corté muy muy corto, con la 00000 los laterales y la nuca y apenas un centimetro le dejé arriba. Fue la mejor experiencia en mi vida y creí que terminaría ahí, pero aún le quedaban matices.
A los pocos dias fue intenso cuando nos encontramos con amigos, y ante el shock por el gran cambio y la pregunta: que te pasó?, el respondió :- a mi marido le dio un ataque de locura y me peló, sonriendo. Solo escucharlo en mi mente decir esa frase, me exita hasta hoy.
De esto ha pasado poco mas de un año y para mi placer, no ha vuelto a cortarse el pelo, y aunque no está tan largo como aquella vez, ya le pasa la boca, tapa las orejas y toca el hombro por detras. Ya hace unos meses que he vuelto a fantasear con repetir la historia, con el agregado que se ha dejado crecer la barba, cosa que odio profundamente. Está de viaje en este momento por un mes, y desde hace un tiempo fantaseo con decirle en tono dominante: disfruta de tu melena y barba porque cuando regreses te voy a afeitar y te voy a pelar otra vez. Se fue y no se lo dije, pero en cualquier momento aprovecho nuestra charla diaria para decirle y comenzar a jugar con eso, porque esta vez no quiere ni afeitarse ni cortarse y tendré que ser mas dominante y agresivo que la ultima vez.
Espero no haberlos aburrido con todo esto y si alguien quiere aportar o comentar algo para la proxima, bienvenido sea. ilhcts gmail.com es mi mail.



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