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estética de los fetiches 4. by FCM Historias
cuarta parte de: estética de los fetiches.Después de la última visita a la estética, hablé con Leidy sobre volver a ir, pidió que tuviera calma, quería que la siguiente vez fuera mejor, yo tenía ganas de ir pero su cabello aún era corto, -¿si volvemos a ir ahora si puede raparte?, -solo si te dejas hacer lo mismo!, -estás loco!, me voy a ver horrible, aparte de que normalmente a mi me cortan más cabello que a ti, -está bien, tienes razón, solo quería ver hasta dónde eras capaz de llegar, -menso, me asustaste, pensé que de verdad querías verme así, -pues no te voy a negar que tengo morbo, pero nunca te obligaría a nada, aparte creo qe te vez muy bien con el cabello corto y disfruto ver como te lo cortan, -solo por ser tan honesto, pensaré en lo que dijiste, pero no creo llegar hasta ahí, quizá si acepto tendría que ser con un numero algo largo de la maquina, pero todo al cero no creo, -con eso me conformaría, -te prometo que lo pensaré pero si tendrás que esperar, no volví a decir nada sobre el tema.
No supe cuanto tiempo había pasado pero el cabello de Leidy estaba demasiado largo, no sé que hacía para que le creciera tanto, aunque al pensarlo me di cuenta de que ya iba más de un año de nuestra ida a la estética, un día la tomé por sorpresa y le jalé su cabello, -¡tonto, eso duele!, se giró para tirar del mío, -waow, no había prestado atención, tu cabello es muy largo, -aún puedo aguantar otro rato!, -¡mañana tenemos cita con Tamara y Leti!, -¿hablas enserio?, -sí, mañana te quitarán todo ese cabello, -prepararé el corte que te harán a ti entonces, -recuerda que no quiero quedar rapada, lo estuve pensando y no puedo llegar a esos niveles, -no importa, aún así será divertido ver tu cambio radical aunque no termines rapada, nos besamos, -gracias por comprenderlo, ¡mañana serás mi chico de la cabeza suave!, no entendí bien eso pero le dije que si, nos fuimos al gimnasio y regresamos para cenar.
Al día siguiente estaba nervioso, no lograba concentrarme adecuadamente para el trabajo, la amiga que nos recomendó la estética llegó a pedirme algo, -tu cabello está muy largo, ya deberían ir con nuestras amigas para que te lo corten, aunque se siente muy bien, ¡ojalá que te lo corten todo!, desearía estar cuando lo hagan!, -estás loca, pero pronto iremos, -¡espero que si, ya te urge un buen corte!, le entregué lo que necesitaba y se fue. Al salir del trabajo fuimos al gimnasio, volvimos a casa para comer y bañarnos, se acercaba la hora, los nervios eran evidentes, podían notarse a kilometros, Leidy quiso manejar, yo estaba temblando durante el camino, estacionó, nos miramos, -¡tranquilo, solo es cabello!, -¿si solo es eso por qué no te dejas rapar?, -buen intento pero no conseguirás convencerme, bajamos del auto y entramos al lugar, esperamos un rato, de pronto alguien levantó mi cabeza, -¡hola guapo!, ¿ya estás listo?, miré hacia arriba, era Tamara, ofreció la mano para levantarme del sillón, -vamos a cortar ese cabello!, la seguimos al cuarto especial, -¡teníamos tiempo esperándoles!, que cabello tan largo traen ambos, dijo Ñeti, -¿se atreverán a algo nuevo o lo mismo de la última vez?, -yo quiero que quede bien peladito esta vez, -¿cabeza suave?, dijo Tamara, -sí, por favor, -por fin se me va a cumplir el gusto de verte así, -¡déjame pelarlo a mi, yo nunca le he podido poner las manos a su cabellera, -¡tiren un volado, la que gane puede hacerlo esta vez y para la siguiente la otra, Tamara no tardó en sacar la moneda y arrojarla, ganó Leti, esta saltó de alegría, -¡ya será para la siguiente!, -¿tienes problema con que yo te lo corte?, si te agrada que te lo corte la rubia puedo dejarle mi oportunidad, -no, no tengo problema, tomó mi brazo para llevarme a su silla, Leidy tomó su lugar en la otra, antes de que nos colocaran la capa Tamara pidió que le enviara la foto del corte que le haría a Leti, le mandé la última que tenía guardada y nos colocaron la capa, -¿seguro que quieres esto para ella?, -sí, bueno, quisiera otra cosa pero no se puede, -quizá en el futuro puedas pedirlo cariño, -¿tú estás de acuerdo con este corte?, -sí, no hay problema, ambas fueron por la maquina, Leti dio la primera pasada desde mi frente hasta atrás, -lo siento pero quiero ir tocando esta cabecita mientras te desprendo tu linda cabellera, no dije nada mientras dio la segunda pasada, -¡tienes demasiado cabello!, -¡tenía, quizá quisiste decir!, -que llorón, apenas voy con la cuarta pasada y ya sientes que te lo corté todo, Tamara le desprendió muy rápido el primer lado a Leidy, se siguió con el otro, Leti dio unas pasadas más, -¡ya vamos logrando ver esos bonitos ojos, inclinó mi cabeza a la izquierda y se deshizo rápidamente de mi patilla , era agradable sentir su mano en la parte superior, mientras pasaba la maquina por el lado derecho, se sentía diferente a cuando Tamara me cortaba, Leslie tenía mucho tacto y lograba hacer que sintiera una excitación mayor, -¡parece que alguien está disfrutando su corte!, dijo Tamara, -sí, parece que yo seré su nueva estilista desde ahora, se pasó al otro lado, Tamara ya estaba terminando con la parte posterior, de Leidy, bueno al menos con el primer protector, Leti comenzó a darme pasadas lentas en la parte posterior, disfrutaba mucho lo que hacía, su idea de tener la mano arriba mientras cortaba lo demás era genial, Tamara era bastante hábil con la maquina y ya iba terminando lo del segundo protector, podía notar que Leidy disfrutaba de lo que le hacían, tenía una gran sonrisa, Leti soltó mi cabeza para ir por el siguiente protector, inclinó mi cabeza al frente, dio la primera pasada con un protector que se sentía pegado a la piel, -¡supongo que esto te excita más!, no dije nada, solo seguí disfrutando, Tamara era rápida, ya iba a la mitad del tercer protector, Leti entendió que debía apresurarse un poco y comenzó a pasar la maquina un poco más rápido, estaba disfrutando tanto que no presté atención, de pronto sentí como la maquina iba desde mi frente hasta atrás, vi a Tamara llevando la maquina desde la frente de Leidy hasta atrás, mis ojos se abrieron, Leti paró para dejarme presenciar aquello, mi erección bajo la capa era muy evidente, casi todo el cabello de la parte superior de Leidy estaba cayendo, cuando sonrió no podía creerlo, -¿no era lo que querías cariño?, -pues, sí, pero no imaginaba que lo harías, -¡eso fue lo que elegiste para mi!, si aceptaste lo que yo pedí era justo que aceptara lo que querías, estaba a punto de llorar, según yo le había mandado una imagen del último corte que le habían hecho, no entendía que había pasado, aunque estaba disfrutando, estaba cayendo lentamente todo ese cabello de la parte superior, -¡creo que ya tengo que continuar contigo, dijo Leti, que no tardó en pasar la maquina desde mi frente hasta atrás, pensaba que me correría pero logré contenerme, ambas terminaron con la parte superior al mismo tiempo, -¿quedarían iguales guapa?, Leidy asintió y lo siguiente fue increíble, las dos comenzaron a pasar la maquina sin protector por la parte superior, era como si estuviera viendo y sintiendo lo que me hacían, Leidy soltó unas lagrimas pero dijo que no me preocupara, solo era porque no podía creer que de verdad estuviera dejando que le quitaran todo el cabello, disfruté de cada pasada, las chicas se entendían con la mirada, nos inclinaron la cabeza a la un lado para quitarnos el lado correspondiente, lo hacían lentamente, repitieron el proceso del otro lado y al terminar, nuestras cabezas se inclinaron al frente, una mano nos mantenía en la posición mientras nos pasaban la maquina desde la base del cuello hasta la coronilla, -¡te vez increíble guapa!, le dijeron ambas, -pero no querías dejarte, estabas toda asustada, -tú también te vez muy bien, menso!, pronto terminaron y procedieron a pasar la maquina por toda la cabeza para asegurarse de que no quedara nada, nos dejaron por un momento, Leidy estaba sonriendo, la veía demasiado sexy pero no tenía el valor para decírselo frente a ellas, ambas volvieron, supe que venía el final cuando sentí algo frío en la cabeza, -ya llegaste hasta aquí guapa, vamos a terminarlo, -me parece perfecto, nos aplicaron la crema de afeitar, con un rastrillo fueron quitando lo que quedaba de cabello, no pude evitar derramar alguna gota de semen por la excitación, notaba como Leidy disfrutaba y más enamorado creía estar de ella, nos dieron una segunda pasada en sentido contrario, limpiaron los residuos e la crema, retiraron la capa y la tira, -¿ya están listos!, bajamos de la silla para ir directamente a abrazarnos, -se siente muy suave como quería, dijo después de acariciarme la cabeza, dirigió mis manos hacia la suya para mostrarme que no tenía problema con el corte, nos besamos, las chicas activaron el mecanismo que mostraba los espejos, contaron hasta tres y giramos para mirarlos, ambos estábamos contentos, ella no tardó en tomarme del brazo para que fuéramos al otro cuarto, aquello fue la primera vez en que de verdad tenía ganas de que nos quitaran el bello corporal, cuando terminaron nos permitieron entrar en su ducha pero quisimos entrar separados para mantener el morbo de lo que pasaría cuando estuviéramos juntos bajo la regadera, salimos, nos vestimos, pagamos, -¡se ven muy bien los dos!, si vuelven pronto prometemos no cobrarles,-dependiendo de lo que pase en casa nos tendrán aquí pronto o tardaremos mucho, dijo Leidy, aceptaron y nos fuimos del lugar…
En casa no pude evitar cargar a Leidy hasta el cuarto, la deposité sobre la cama, -¿si te gusta como me veo?, le pedí que se levantara, quedó de pie a un lado de la cama, le metí un dedo para comprobar que tan lista estaba, le lamí detrás de las orejas, mordí levemente sus orejas, cuando estuvo lista la penetré y quedamos sentados sobre la cama, ella estaba disfrutando, lamí y succione su nuca, -¿esto responde tu pregunta?, -no muy bien, al jugar con sus pechos no paraba de gemir, -¿y ahora?, no pudo ni responder, tuvo su orgasmo y caímos acostados sobre la cama, -¡si quieres que me quede así puedo hacerlo!, -¡eres la mejor, pero dependerá de que tanto te guste a ti estar así!, -¡a mi me gusta tu cabeza suave!, pero siendo chica tendría que acostumbrarme a lo que puedan decir de mi, -¿vez como si depende de ti?, nos besamos, -¡haré mi mejor esfuerzos te quedas así!, -¡tememos un trato!
