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corte por nueva escuela by FCM Historias
Cuando era niño tenía una vecina estilista, era la mejor amiga de mi madre y tenía una hija de mi edad nos hicimos amigos, su nombre era Melanie, pero la llamábamos Lani, al llevarnos bien solíamos hacer trabajos en equipo para evitar ir a otras casas, ella siempre jalaba mi cabello y le decía a su mamá que debía cocármelo algún día, por suerte mi madre nunca cedió al capricho de Lani, fuimos creciendo y rara vez recibí algún despunte de Laura, pero mi madre estaba muy pendiente de que cortara solo lo necesario,así pasaron los años hasta que terminamos por entrar a la prepa, mi madre estaba muy contenta, aunque Laura y su hija parecían aún más, no entendía los motivos pero no importaba, Lani me había gustado pero su madre me daba miedo, no quería que pasara algo y terminara haciéndole algo a mi cabello por desquitarse, faltaban tres semanas para entrar a la preparatoria cuando me encontré con unos amigos, dijeron a que escuela se irían, por desgracia ninguno iría a la mía, o al menos eso dijeron, cuando mencioné el nombre de la mía se asustaron, -¿eso significa que cortaran tu cabello por primera vez?, , -¡no entiendo de que hablas!, -hasta dónde yo sabía en esa escuela son bastante estrictos con el cabello, por eso te digo que me sorprende que aceptaras ir ahí, sobre todo porque jamás te hemos visto con el cabello corto, -¡supongo que habrán cambiado las reglas, por eso mi madre sugirió que fuéra ahí!, -¡pues espero que si amigo!, de lo contrario prepárate para lo peor, todos nos despedimos, fui a casa algo desconcertado, -¿puedo saber por qué me metiste a una escuela en la que son tan estrictos con el cabello?, -¿de que hablas?, -me acabo de enterar que en esa preparatoria son estrictos con el corte, -no sé quien te dijo eso pero supongo que te mintieron, llevo todos estos años cuidando tu cabello como para que pienses que lo pondré en riesgo, -¡tienes razón mamá!, creo que quien me lo dijo mintió, estuve tranquilo durante los siguientes días…
Noté un poco estresada a mi madre durante la última semana que faltaba para que entrara a la escuela, supuse que eran cosas del trabajo y de lo que teníamos que conseguir antes de que entrara a clases, un día antes fui a buscar a Lani, su madre le estaba cortando el cabello, habíamos acordado ir al parque, tuve que esperar a que terminaran de cortar su cabello, por alguna razón me sentí extraño presenciando aquello, no le di mucha importancia, cuando su madre terminó Lani se veía muy bien, le había cambiado el look para que entrara a la escuela diferente, -¿no quieres que te haga un corte también?, -no gracias, Lani tomó mi brazo y nos fuimos del lugar, estuvimos paseando en el parque, compramos algunas cosas y en algún momento después de comer me recosté sobre sus piernas, acarició mi cabello durante un rato, cuando sentimos que ya era tarde volvimos a casa para preparar lo que faltara para el día siguiente, no tardé mucho alistando mis cosas, mi madre andaba ocupada, -¿crees que puedas ir solo con Laura para que te despunte el cabello?, no quiero que vallas así mañana y no tuve tiempo de que fuéramos con alguien más, -creo que si puedo ir solo, tomé dinero del lugar que dijo y fui con Laura, iba nervioso, cuando llegué estaba atendiendo a una chica, pensé en regresar a casa y explicarle a mi madre, -¡no, espera, tu madre me marcó para darme indicaciones!, siéntate a esperar, lo hice sin protestar, ver ese proceso de la clienta llamó mi atención, Lani salió cuando la clienta estaba pagando, -¡en un momento ya te atiendo!, Lani tomó la escoba para limpiar el piso, -¿que te parece si mejor me ayudas a cerrar la cortina?, ya es tarde y nuestro amigo será el último cliente, Lani fue a cerrar mientras su madre terminaba de quitar el cabello, -¡ahora sí, puedes sentarte por favor!, dijo mientras golpeaba la silla con la mano, procedí a cambiarme de asiento, Lani pidió ponerme la tira y la capa aunque solo era un despunte, no dejaba de acariciar mi cabello, logró distraerme, giró la silla para no dejarme ver el espejo, su madre desenredó mi cabello con un peine, lo hizo delicadamente, luego fue por algo al mueble y cuando volvió giró la silla para que mirara al espejo, eso me tranquilizó, -¿te dijo tu mamá algo del corte?, dijo mientras tomaba el cabello entre sus dedos, -¡solo será un despunte!, sus dedos se movieron rápidamente cortando cerca de mi cabeza, -¡entonces no se atrevió a decirte nada!, -¿por qué cortó tanto?, -hizo un segundo y tercer corte con las tijeras, -espero que no termines odiándome cuando termine, -¿por qué está cortando tanto?, -porque lo piden en tu escuela!, pensaba que tu madre te lo diría pero no tuvo el valor de hacerlo, ¡voy a cortarlo todo, -¡eso no es verdad!, intenté levantarme pero estaba amarrado a la silla, -¿cuando me amarró?, -lo hizo mi hija, mientras te acariciaba el cabello consiguió amarrarte para evitar problemas, -¡están locas!, suéltenme, -tranquilo, solo es cabello, aunque entiendo que estés así por culpa de tu madre, nunca permitió que te cortaran el cabello y ahora tenemos este problema que tengo que solucionar, no podía creer lo que estaba pasando, vi que regresaba de su mueble con algo detrás de la espalda, levantó mi cabello de la parte posterior, un zumbido llenó la habitación, -¡no, por favor no!, inclinó mi cabeza al frente y pegó la maquina a mi cuello, la deslizó lentamente hasta la coronilla, mis ojos se abrieron al ver todo el cabello que deslizaba por la capa de color rojo, dio la siguiente pasada, la capa comenzó a oscurecerse, -¡no tengas miedo de llorar!, estás en confianza, sé que esto no es fácil para ti, no pude evitarlo y rompí a llorar mientras continuaba pasando la maquina, -¡te pido perdón por esto!, pero creo que era necesario, tu madre dijo que perdías mucho tiempo cuidando este cabello, creía que podía distraerte de tus estudios ahora que irás a la preparatoria, estaba segura de no poder convencerte y por eso aceptó meterte en esa escuela, Lani dijo que quería acompañarte y por eso también irá ahí, su corte también tiene que ver con las reglas de la escuela pero no te dijo nada para que sufrieras menos, dobló la oreja del lado izquierdo para ir despejando esa área, no podía parar de llorar, rápidamente se pasó hacia mi patilla, la levantó, sin perder tiempo cortó hasta la sien, era demasiado cabello, pude controlarme cuando estaba pasando la maquina para asegurarse de que todo quedaba parejo, la sensación no era tan mala, se cambió al lado derecho aunque esta vez se deshizo de la patilla primero, aquello se sintió bien a pesar de saber que lo estaba perdiendo todo, -¡te vas a ver muy bien sin tanto cabello estorbando!, -gracias por la consolación, -¡era enserio!, te prometo que no te vas a ver mal cuando termine, mi flequillo estaba tapando mi vista y no sabía como iba quedando, sentí la maquina pasar cerca de mi ceja, -¡tranquilo!, esa no te la pienso cortar, siguió dando pasadas hasta quedar conforme, puso la maquina en mi sien derecha, justo antes del flequillo, la llevó hacia la izquierda lentamente, aquello hizo que sintiera algo bajo la capa, seguí sin poder mirar, de pronto comencé a ver como mi flequillo deslizaba por mi cara lentamente y terminaba sobre la capa, la silla giró para impedirme verme el tiempo suficiente, pude ver que Laura lo estaba disfrutando, puso una mano sobre mi nuca, llevó la maquina desde mi frente hasta atrás, aquello consiguió que estuviera teniendo una erección bajo la capa, no podía creer lo que sucedía, en la siguiente pasada sonreí involuntariamente, -¡siempre lo quisiste!, pero no tenías el valor para pedirlo, -no sé de que me habla, -¡si lo sabes pero no quieres reconocerlo!, dijo mientras una gran cantidad de cabello era desprendida de mi cabeza, -¡por fin vamos a poder ver bien esos ojos tan lindos que tienes!, aquello hizo que me sintiera extraño, una siguiente pasada dejó solo una última franja por cortar, -¡te vez muy bien!, dijo Lani, sin darme tiempo de responder, su madre inclinó mi cabeza al frente, la maquina volvió a subir hasta la coronilla, pude sentir un metal tocando mi cabeza, rápidamente dio pasadas por todo el resto de la cabeza, al llegar a la parte superior redujo la velocidad, la pasó más lento, mi erección ya era evidente, por suerte con tanto cabello se disimulaba, se sentía increíble cada pasada que daba, llegó a la franja que había quedado sin cortar y se deshizo de ella lo más lento que pudo, pasó la maquina por toda mi cabeza y apagó la maquina, -¿lo vas a terminar verdad?, dijo Lani mientras acariciaba mi cabeza sonriendo, -sí, tengo que hacerlo porque no sabemos si habrá una próxima ocasión, no entendía de que hablaban pero sentí algo frío siendo esparcido por mi cabeza, mi cabeza fue inclinada al frente y escuché un ruido familiar, la sensación era mejor que la de la maquina, -¡no te vallas a mover por favor!, decidí cooperar y disfrutar de lo que hacía, poco a poco fue quitando la crema de afeitar con un rastrillo, no pude evitar sonreír cuando llevó el rastrillo desde la coronilla hacia mi frente, no tardó mucho en terminar, Lani no dejaba de mirarme, -¡aún no termino!, falta la segunda pasada, -¿para que una segunda?, -¡en unos momentos lo sabrás, dijo mientras esparcía la crema de afeitar, esta vez lo hizo en sentido contrario, disfruté mucho más de esa pasada, parecía una experta utilizando el rastrillo, pronto terminó, limpió los restos de la crema, pasó un cepillo extraño por mi cabeza y cuello, desabrochó la capa la retiró junto con la tira, Lani liberó mis manos, tomó mi mano para levantarme y fuimos hasta la estación de lavado, después de prepararme su madre se acercó para lavar mi cabeza, aquella sensación era increíble, terminó rápido, utilizó una toalla para secarme y regresamos a la silla de corte, con la secadora terminó de dejar lis mi cabeza, me giró al espejo, no podía creerlo, era otra persona completamente diferente, ambas no dejaban de reír por mi cara de sorpresa, Laura fue por un bote, se paró detrás, preparó lo que parecía una crema en sus manos y comenzó a aplicarla sobre mi cabeza, -¡es para que no brille tu cabeza ahora que te afeité!, pude levantarme y mirarme de cerca en el espejo, me gustaba la apariencia aunque no sabía lo que dirían los demás cuando me vieran, Lani pasó su mano por mi cabeza, -¡te vez muy bien!, -gracias, aunque no termino de creer que de verdad estoy así, -deberías de pensar en conservarlo, yo con todo gusto podría pasarte la maquina si mi mamá está ocupada, -es pronto para decidirlo, -nadie te presiona, solo fue sugerencia porque a mi me encanta, su madre no quizo cobrarme y Lani dijo que me acompañaría a casa, nos despedimos y quedamos de ir juntos a la escuela. -¡te quedó muy bien el corte!, -debiste decirme lo que harían, -si lo hubiera hecho aún estarías llorando, -creo que tienes razón, nos dimos un abrazo mientras ella acarició mi cabeza, -¡te juro que era por tu bien!, -si, creo que si estaba obsesionado con mi cabello, aunque lo de amarrarme no fue la mejor idea, -¡no sabía que te amarrarían!, lo siento, nos fuimos a cenar y me metí a bañar, fue una gozada sentir el agua en mi cabeza.
Al día siguiente cuando pensaba ir por Lani para irnos juntos, ya estaba esperando afuera de mi casa, antes de irnos sacó la crema del día anterior y la aplicó en mi cabeza, nos fuimos tomados de la mano y sin necesidad de pedírselo ya éramos novios…
